Queridos compatriotas, Honorables miembros de este Congreso Nacional
Me toca asumir la Presidencia Constitucional de la República en un momento crucial de nuestra historia. Pocas veces en nuestro pasado la Nación ha afrontado un momento como este.
Hoy, me embargan tres sentimientos que nacen del corazón: el dolor, la esperanza y la fortaleza.
Mi primera obligación, compatriotas, es rendir mi más profundo, sentido y admirado homenaje a las mujeres y a los hombres de Bolivia que en estos días dramáticos ofrendaron su vida por la patria, por la democracia, por el futuro y por la vida.Quiero pedirles que nos pongamos de pie y que guardemos silencio para rendirles homenaje.
Una vez más el pueblo boliviano se define como un pueblo con convicción por la libertad, por la preservación de su integridad, por la soberanía, por la lucha permanente por estos valores. Sobre todo, por una democracia para todos.
Este es el escenario sobre el que tenemos hoy que construir nuestro futuro. Es indispensable que entendamos cómo debemos concebirnos como ciudadanos y cómo hacerlo en este espacio, bajo el manto de la bandera boliviana y como bolivianos.
Bolivia es una nación compleja, plural y diversa. Solamente se la podrá construir sobre su pluralidad y sobre su diversidad, pero si no incluimos el concepto de unidad a los otros dos conceptos esenciales, no seremos capaces de preservar, como nos pidió el Mariscal Antonio José de Sucre, la integridad de la Nación. “Solo un premio le pido a la Patria”, nos decía el Mariscal Sucre, y este es, preservar su unidad.
Pero no podemos mirar a Bolivia si no miramos a quienes durante siglos han estado excluidos, si no los miramos en la lógica de darles respuestas a lo que no es otra cosa que una legítima demanda, un legítimo derecho, el de su presencia, que sean de verdad ciudadanos de primera en un país entre iguales. Y Bolivia no es todavía un país entre iguales. Debemos ser capaces de entender al país, a partir de pueblos como los quechuas, los aymaras, los guaranís, y todos los pueblos que habitan nuestro territorio, que han construido con su sangre hasta ahora una historia de desigualdad que estamos obligados a reparar.
Sería sin embargo insuficiente concebir a Bolivia exclusivamente en ese escenario y en ese contexto. Bolivia ha crecido -y hay que dar gracias porque eso haya ocurrido- para integrarse en el escenario geográfico de su totalidad territorial. Esa totalidad ha unido al occidente, al oriente, al norte y al sur, pero no todavía con la cohesión indispensable para concebirnos como una unidad en la diversidad. Hemos construido juntos, a pesar de nuestras diferencias, a pesar de esa discriminación y desigualdad no resueltas, un escenario de presente mucho más amplio que aquel que tuvimos en 1825, incluso con el dolor y la paradoja de las pérdidas territoriales de la Nación. Ya nadie puede discutir hoy, que nuestro oriente, Pando, Beni, Santa Cruz, son parte fuerte, necesaria, extraordinaria de la Nación Boliviana; como nadie puede discutir hoy que Tarija, Chuquisaca, Cochabamba, Potosí, Oruro y La Paz, son partes de un todo que no puede ni debe concebirse por separado.
Seamos capaces de mirar al país en un momento como este sobre la base de la unidad, seamos capaces de entender desde el occidente que nuestra visión tiene que compartirse con la visión del oriente, del norte y del sur. Seamos capaces desde el oriente -hoy una región creadora, admirable, generadora de riqueza- de entender que solamente aceptando la inclusión y la integración podremos vernos como un todo.
Quiero hoy, porque a nadie se le escapa que la unidad de Bolivia está en riesgo, convocar al conjunto de los bolivianos a entendernos, a respetarnos unos a otros, a ser capaces de poner el hombro uno al lado del otro en este escenario común que nos cobija. Nos estamos jugando el destino y el futuro, si no entendemos eso, no entenderemos por qué es indispensable desprendernos de egoísmo, mezquindad y cálculo. Entender que los viejos odios solo se resuelven en la construcción de un escenario de paz. Por eso invoco hoy, en un momento tan duro y tan difícil como este, a todos y cada uno de ustedes, compatriotas, a reconstruir la paz que ha estado a punto de perderse en estos días terribles. Sólo con la idea de una paz anclada en el respeto a los derechos humanos y en el respeto a la vida, que es el bien y el don más preciado que tiene cualquier ciudadano, es que podremos entender una Nación que solamente tiene sentido si garantiza la vida como valor sagrado y les da una vida digna a sus mujeres y a sus hombres.
Esta invocación a la paz exige un desarme inmediato. Esta invocación a la paz demanda, sobre la base de una propuesta sensata, racional, comprometida y transparente de mi parte como Presidente de la República, que seamos capaces de empezar hoy mismo rompiendo los escenarios de confrontación en cualquier punto del país, donde esos escenarios de confrontación se hayan planteado.
Quiero mencionar ahora cuáles son los desafíos a los que tenemos que responder de manera inmediata y que en muchos sentidos han surgido y confluyen a partir de los acontecimientos que nos ha tocado vivir en las últimas semanas. Mi gobierno tiene varios desafíos que nacen de las demandas planteadas por todos y cada uno de los bolivianos.
Mi gobierno tiene el desafío de responder al tema del gas, que no puede responderse sin la participación del conjunto de los bolivianos y de las bolivianas. Tiene que ver con el futuro y con nuestra viabilidad de corto y mediano plazo, cuando menos. Lo que decidamos en torno a esta riqueza natural será decisivo para nuestro desarrollo interno y para nuestro relacionamiento con el mundo. Cuando tomemos la decisión debemos pensar en lo que ésta implica. La demanda de la sociedad boliviana ha sido un Referéndum vinculante y la respuesta del presidente Carlos Mesa es mi compromiso de llevar adelante un Referéndum vinculante sobre nuestros hidrocarburos. Este es un aspecto fundamental. Ojalá seamos capaces de responder en ese Referéndum con conciencia, sin manipulaciones de una y de otra parte, sobre un debate abierto, limpio, transparente y comprometido de todos y cada uno de nosotros para defender de verdad las ideas que creemos que hacen mejor y más comprensible la respuesta que la ciudadanos tienen que dar. Este Referéndum tiene que hacerse sobre la base de la importancia de los hidrocarburos y su administración. En este contexto también debemos trabajar en una modificación de la Ley de Hidrocarburos y en un análisis en profundidad de lo que hasta ahora ha representado el proceso de Capitalización.
El otro elemento central, el verdadero nudo que tenemos que ser capaces de desatar para la construcción del nuevo país que necesitamos, es la demanda de convocar a una Asamblea Constituyente. ¿Qué quiere decir Asamblea Constituyente? Y aquí quiero reconocer claramente algo. Ustedes colegas parlamentarios y el país, lo saben. Originalmente no fui proclive a la Asamblea Constituyente dada mi visión de lo que es una Constitución. Pero un ciudadano, y eso es lo que soy, debe expresar una opinión y escuchar las opiniones del conjunto de la sociedad. Indudablemente el escenario histórico de hoy, demanda un diseño de sociedad distinto del diseño de sociedad que nos ha llevado hasta donde hoy estamos. Una Asamblea Constituyente ahora, quiere decir que vamos a discutir qué país queremos y cuáles son las reglas del juego sobre las que este país va a funcionar una vez que ese proceso se lleve adelante. Esto quiere decir que todos y cada uno de nosotros, debemos llevar a la Asamblea Constituyente elementos centrales de forma y de fondo que definirán temas esenciales sobre nuestros recursos naturales, sobre la tierra, sobre la concepción de la participación democrática ciudadana, sobre la estructura del funcionamiento de un mecanismo de representación como es el Congreso Nacional, sobre todos los temas que nos importan.
Quiero mencionar aquí la propuesta nacida en el Departamento de Santa Cruz. Una propuesta que busca la refundación de Bolivia. Quiero destacar que justamente la creatividad expresada en esa propuesta de país, tiene un punto de partida en un escenario geográfico e histórico tan vital como es Santa Cruz. Quiero recordar también que en este mismo Parlamento, cuando se planteó la discusión sobre ese documento, nació una respuesta del occidente de Bolivia, de partidos políticos distintos, que decían: es una base de discusión. Esa base de discusión, por supuesto, debe ser enriquecida en todos los ámbitos de la Nación, tiene que ser planteada a partir de una concepción transparente, porque nos estamos jugando el futuro, y eso implica responsabilidad, racionalidad, pero también firmeza en los principios que cada uno de nosotros defiende en torno a la Asamblea Constituyente.
Por eso planteo como una obligación de mi gestión presidencial, el encontrar el camino adecuado para tener una Asamblea Constituyente que defina en un plazo corto, pero en un plazo acotado razonablemente, lo que va a ser la concepción de nuestro futuro.
Otro tema fundamental es la temporalidad de mi gobierno. La Constitución Política del Estado y el mandato que este Congreso me da, en función de lo que dice un artículo específico de su texto en el caso de la sucesión constitucional, indica que mi mandato debe concluir el 6 de agosto del año 2007. Quiero proponer formalmente al Congreso Nacional la consideración de un tiempo de transición histórica que nos permita dar una respuesta a estos dos desafíos mencionados y que nos permita convocar a elecciones transparentes, creíbles y efectivas para consagrar a un nuevo Presidente en un tiempo que este Congreso y el Poder Ejecutivo que va a comenzar a trabajar, traduzca como razonable.
Pero quiero decirles también claramente que yo entiendo que mi obligación es presidir un gobierno de transición histórica que responda a estas demandas. Dejo planteada esta propuesta al Congreso de la Nación para que podamos estudiar con serenidad el espacio y el tiempo del desarrollo de esta gestión.
Toco ahora una cuestión crucial para el país y quiero pedirle a este Congreso y a los partidos políticos que lo representan, una acción de sacrificio, desprendimiento y compromiso con la Patria. Creo que los bolivianos que me ven hoy como Presidente de la República quieren un gobierno con las mejores y los mejores bolivianos, y eso quiere decir un gobierno que tenga un Poder Ejecutivo que no cuente con la participación activa de ningún partido político. Un gobierno desprendido de la militancia partidaria es un gobierno que tiene que recuperar credibilidad para los partidos políticos. Estoy absolutamente convencido de que la democracia solo se puede entender a través de partidos políticos fuertes creíbles, transparentes y renovados. No estoy planteando una acción contraria a la política sino un escenario de recuperación de la credibilidad perdida por el Poder Ejecutivo, el Parlamento y en consecuencia por los partidos políticos. Eso sólo será posible si ustedes, miembros de este Parlamento, apoyan mi gobierno a pesar de que les estoy pidiendo el sacrificio de que sus partidos no integren el Poder Ejecutivo. Si ustedes no me apoyan, no vamos a poder salir adelante.
Creo que todos nosotros somos conscientes de que si el país se está jugando la vida, tenemos que estar dispuestos a dar todo para que no la pierda. Ustedes saben, tan bien como yo, que está en cuestión nuestra viabilidad como estructura democrática creíble y construida para el largo plazo. Los partidos van a responder hoy al más grande desafío de su historia. Hay en este Parlamento partidos con una riquísima y admirable historia, y hay partidos nuevos con unos increíbles y grandes desafíos, todos por igual corren el riesgo de que el país les de -nos de- la espalda. Seamos capaces de entender que la salvación de aquello por lo que apostamos a lo largo de nuestra vida, la salvación de esas ideas, de esa estructura política en la que ustedes creyeron, pasa por la capacidad que tengan de dar generosamente a Bolivia un gobierno estable, con un respaldo parlamentario sólido y con una independencia que le permita un manejo sensato en función de los intereses del país.
Dos temas fundamentales. Fui elegido Vicepresidente de la República, entre otros aspectos fundamentales, para luchar contra la corrupción. Una tarea clara, inequívoca, sin concesiones que hará a mi gobierno, es una lucha frontal sin ningún tipo de temor contra la corrupción en cualquiera de los escenarios del Estado.
En un momento de crisis tan seria, se ha puesto a prueba nuestra institucionalidad que ha demostrado a pesar de todo -y por eso están ustedes y estoy yo aquí- que hemos preservado las instituciones centrales que permiten el avance de esta democracia hacia un horizonte de esperanza. Pero está claro que el conjunto de las instituciones del Estado Boliviano atraviesa una seria crisis y tenemos que trabajar fuertemente por la fortaleza de todas y cada una de sus instituciones y por la recomposición de la relación entre el Estado y la sociedad que, hoy por hoy, está quebrada. Tenemos que recomponer un Estado que responda al ciudadano y un ciudadano que se sienta comprometido con el Estado, porque ese Estado es el que sirve al ciudadano. Esa relación, quebrada hoy, pasa por la recuperación del cumplimiento de la ley, un tema que -ustedes saben- toqué con preocupación el pasado 6 de agosto (de 2003). Entendamos que sólo el cumplimiento de la ley, una ley igual para todos, cosa que ahora no ocurre, nos permita encarar de hoy en adelante el escenario del futuro.
Otro aspecto fundamental es la austeridad. Que la austeridad no sea palabra, que sea obra. Espero poder mostrarles en el ejercicio de la presidencia y en la administración del gobierno, que si vamos a pedir sacrificios seamos capaces de ejemplificar ese sacrificio nosotros mismos desde la administración del Estado y en particular del gobierno de la Nación.
Quiero ahora pedirle con toda humildad al pueblo de Bolivia que nos de un espacio y un tiempo para trabajar. Quiero pedir a mis compatriotas que la construcción de la paz y la recomposición de la vida como nuestro valor fundamental, comience por el desprendimiento de quienes hoy están ejercitando medidas de presión por demandas que creo que en una parte esencial este Presidente responderá desde su primer día de gestión. Si no somos capaces de desarmar nuestros espíritus en el corazón y en la acción, no tendremos posibilidades de recomponer el escenario inmediato que nos toca por delante. Es un pedido ferviente para que la paz se vea en las calles, en las carreteras, en los pueblos y en las ciudades de todo el territorio nacional, para que la paz, la garantía de los derechos ciudadanos y de los derechos humanos, nos permita un manejo de un país que funciona civilizadamente a partir del diálogo, a partir de la construcción sin presiones. Si las presiones no cesan, no podremos encarar los graves desafíos que tenemos por delante, aún sabiendo que muchas de las personas que han tomado medidas de presión, tienen demandas que van más allá de esta coyuntura y que se remontan a un largo y doloroso pasado. Hagamos un esfuerzo, desprendámonos de nuestras posiciones, la de cada uno, para que la discusión de esas demandas hoy, mañana, pasado mañana no se hagan sobre la base de la presión.
Quiero decirles con absoluta honestidad que la situación económica del país es extremadamente delicada. Tenemos todos que hacer un esfuerzo de desprendimiento para que esa situación -y confío en el apoyo, el entendimiento y la comprensión que ya me han adelantado hoy mismo las naciones y los organismos de la comunidad internacional para respaldarnos en este momento tan difícil- , que la responsabilidad de los bolivianos nos permita superar un trance tan especialmente difícil. El Estado hoy no puede dar una respuesta eficiente y efectiva a todas las demandas legítimas del pueblo. Es necesario que entiendan que en la medida en que recompongamos una estructura básica de funcionamiento económico, podremos comenzar a analizar todas y cada una de las respuestas a las que estamos obligados, pero quiero decirles también que aquellas respuestas que podemos dar en pequeña escala y que dan una señal de nuestra voluntad, las vamos a dar inmediatamente. No estoy en la lógica de decir, esto es no, y no hay un milímetro del que me pueda mover desde ese no. En la medida de las posibilidades que demostrará nuestra voluntad, vamos a trabajar para que esa voluntad se exprese en hechos.
Compatriotas, el destino de Bolivia está en nuestras manos, pongámonos a reflexionar desde el alma de cada uno de nosotros. En cada uno de los corazones y de los espíritus de ustedes hay una visión de Bolivia. En cada uno de ustedes que están mirándome por la televisión, que me están escuchando por la radio, que están aquí presentes, hay una visión de Bolivia. Trabajemos para que esa visión sea la de garantizar y preservar la unidad en la diversidad de la Patria toda. Trabajemos para diseñar una Nación que nos dé cobijo con mayor equidad, con mayor justicia, con un reconocimiento de que aquello que no hemos hecho a lo largo de siglos por nuestros compatriotas excluidos, lo podamos hacer desde el escenario en el que estemos.
Sin ustedes no voy a poder gobernar, ustedes y yo tenemos la misma responsabilidad, yo como el primer servidor de Bolivia. Servidor, un hombre que sirve a la Nación, no un hombre que se sirve de la Nación. Un hombre que cree en la Nación a la que se debe.
Voy a decir, para terminar, que el dolor tiene que transformarse en vida, que la esperanza tiene que ser el escenario en el que construyamos el futuro, y que en nuestra fortaleza de espíritu está la certeza del éxito. Que la bendición de Dios, el mío, el de cualquiera de ustedes, aquel Dios o aquella divinidad en la que cada uno de los bolivianos crea, nos ilumine para que Bolivia salga con bien de este trance tan difícil.
Muchas gracias.
* Esta versión del discurso tiene mis correcciones de estilo, dado que fue un discurso improvisado. Esas correcciones, exclusivamente de forma, no alteran un milímetro su contenido.
Carlos,
¿Cuánto tiempo le tomó realizar este discurso? Porque asumo que no se lo esperaba, ¿o si?
Daniel Abel Araoz Pacheco
Lo pensé el 17 de octubre un par de horas antes de mi posesión, y como todos los discursos presidenciales que hice a lo largo de mi mandato, lo dije directamente sin papel ni apunte alguno
El mejor discurso que leí en mucho tiempo, se extrañan de esta calidad en estos tiempos.
Estimado Sr. Mesa, lo felicito sinceramente por su blog y sus entradas.
Ud. es un auténtico demócrata, sin duda, veraz y confiable, como pocos en Bolivia ; personalmente pienso que ud. es, sin duda alguna, parte de lo mejor de la política boliviana, se lo digo muy sinceramente, no lo estoy adulando gratuitamente; se lo digo tal como acostumbro a opinar en su blog muchas veces, con la verdad dura y cruda de mi pensamiento; aunque no faltará quién ahora intente comprometer mi opinión con su blog; la recontra-contra inteligencia boliviana en manos del Sr Castro, o del Sr.Céspedes, ….seguro alguno de ellos intentará comprometernos maquiavélicamente como «socios» en contra de Bolivia….bueno, veremos
Sr. Mesa,….si ud. volviese a ser Presidente de Bolivia, algo muy posible y deseable por cierto, no tan sólo para Bolivia sino para toda L.A. …., yo le pediría, con toda sinceridad y respeto , que busque la amistad y el entendimiento con Chile, en el entendido de que no habrá mar soberano para Bolivia en el Pacífico, pero sÍ mucho entendimiento y compromisos para que Bolivia » sienta» que también tiene mar y comercio en el Pacífico . Creo de verdad, que todo aquello es posible y que también Bolivia podrá apreciar la amistad del pueblo chileno.
Le aconsejaría a Bolivia que ,…aún no teniendo soberanía, sepa negociar para tener presencia activa y productiva en el Pacífico. Chile está abierto a una negociación de mutua conveniencia, siempre y cuando no se incluya el término «soberanía»; Bolivia tiene que demostrar capacidad de negociación con Chile, sin odiosidad, sin resquemores del pasado, algo difícil, sin duda.
Es hora de que Bolivia comience a progresar política y económicamente, y nosotros, los chilenos, estamos dispuestos a ayudar al pueblo boliviano.
Sr. Mesa, se lo digo sinceramente, sin falsedades; Chile podría hacer con Bolivia un NUEVO GRAN TRATADO Y COMPROMISO, UNA ALIANZA VIRTUOSA PARA AMBOS PAISES, que ayude a Bolivia a salir del subdesarrollo, a progresar, pero eso implicaría dejar atrás los odios del pasado, el chovinismo presente, y el absurdo reclamo de soberanía.
Sr. Mesa, Chile espera que Bolivia decida ser un amigo eterno, no enemigo eterno.
Mis respetos y parabienes para ud.
Tuve el alto honor del cual me siento orgulloso de trabajar en su administracion como prefecto de Pando,ahora me encuentro en exilio voluntario,porque es pecado mortal en esta epoca,todo lo que fué anterior a esta dictadura
Solo mi saludo a un gran hombre y mejor gobernante
Muchas gracias
Querido Carlos:
He releido tu discurso y he sentido en mi corazon la verdad de lo que nos dices como bolivianos y tu como el primero de nosotros; creo que en ese momento tenias razon y ahora otra vez la tienes y no solo para nuestro pais, sino para otros.
Un muy fuerte abrazo y el mayor de mis respetos.
Cote.
Además de la NULIDAD de las sucesiones presidenciales de Mesa y Rodríguez Veltzé (ya que por imperio del Art. 93 de la Constitución de 1967 al presidente GSL no le estaba permitido “renunciar”, y menos considerar su provocada ausencia como “renuncia” -de hecho-), la convocatoria a la Asamblea Constituyente (derivativa, por cierto), su elección, su producto, la convocatoria a Referéndum para aprobar el «aborto constitucional», y por ende, la CPE de 2009, SON NULOS.
Por ende, lógicamente, la CPE de 1967 (cnrfms.) SIGUE PLENAMENTE VIGENTE Y EFICAZ!!!!!!!
Franz,
Por que no declar NULO todo lo acontecido desde Garcia Meza, o mejor aun desde la revolución de 1952. Mejor declaremos NULO todo lo acontecido desde la independencia. Me imagino que la norma vigente antes de 1825 habrá sido vulnerada de alguna manera. Se me ocurre que siguiendo tu “lógica” deberíamos declarar todo NULO desde que Eva mordió la manzana.
Siguiendo tu “lógica,” Sanchez de Lozada seria todavía presidente. Como él se encuentra de viaje, me imagino que el vicepresidente debería asumir las funciones. Como Allende fue derrocado inconstitucionalmente en Chile, los Chilenos deberían declar NULO todo lo que ha pasado desde entonces incluido todos los decretos de Pinochet. Lamentablemente Allende ya esta muerto, me imagino que el vicepresidente de entonces debería asumir la presidencia, asumiendo que la constitución Chilena sigue ese mecanismo de sucesión. Lamentablemente el vicepresidente también esta muerto. Entonces el presidente de alguna de las cámaras? Probablemente hayan pasado a mejor vida también. Que dilema! Siguiendo tu “lógica” la esclavitud en el sur de los Estados Unidos debería ser restituida, porque los pobrecitos dueños de plantaciones y esclavos fueron coaccionados a renunciar a sus derechos “constitucionales.” Siguiendo tu “lógica” se debería restituir la monarquía en Francia y declar NULO todo los acontecido desde la revolución Francesa. ETC, ETC, ETC.
El extremismo pseudo-juridico te impide “ver” que cuando un gobierno pierde LEGITIMIDAD ante los electores, o en algunos casos ante grupos de poder o elites como en el caso chileno, entonces ocurren cataclismos políticos cuyas consecuencias no son previstas por el ordenamiento jurídico vigente en ese momento. Un poquito de historia Franz!
Pero tu sofisma no solamente contiene errores “insubsanables” de orden exógeno pero también inconsistencias internas. Cuando argumentas acerca del “supuesto acto de renuncia de Sanchez de Lozada,” te olvidas que todas las personas tienen (o deberían tener) el derecho de renunciar a cualquier actividad que por cualquier circunstancia ya no están interesadas en continuar. Por que le quitas a Sanchez de Lozada el derecho de marcharse ante el fracaso estrepitoso de su gobierno LEGAL pero ILEGITIMO ante una gran mayoría de los bolivianos? Me imagino que si hubieras sido el “abogado” de turno, le hubieras dicho a Sanchez de Lozada y a todos los bolivianos, que Sanchez de Lozada no podía abandonar el gobierno porque supuestamente no existe la figura de renuncia en la constitución. Gracioso que no pienses en las implicaciones de lo que escribes. Analizando tu argumento acerca de lo que llamas la “inexistente” renuncia (que en realidad existió. La prueba es la carta que GSL mando al congreso) que, según tu “análisis” debería ser nula por que fue resuelta bajo “violencia, intimidación, y/o amenazas” debo decirte que Sanchez de Lozada nunca expreso que había escrito la carta de renuncia con un revolver en la sien. Convulsiones sociales han ocurrido y ocurren en todo el tiempo. Algunas de estas, dependiendo de la gravedad del asunto, termina con la renuncia del presidente, como es el caso reciente de Egipto o Túnez. En otros casos, los gobernantes se aferran al poder a toda costa, me imagino que sus “asesores” utilizan argumentos a tu estilo para convencerlos de que sus gobiernos son legales. Por ejemplo, Siria, el actual presidente insiste que es el presidente “legal” de Siria y ha preferido llevar a su país al borde de la destrucción. En otros casos menos dramáticos, las protestas y presión social en los años 60 en los Estados Unidos no desemboco en la renuncia del presidente Lyndon Johnson. Johnson se mantuvo en el poder porque decidió acceder a la gran mayoría de las demandas de los que tu llamarías “revoltosos.” Otro ejemplo, y salvando las obvia diferencias entre todos estos casos, las revueltas estudiantiles en Chile hace un par de años no obligaron al presidente Piñera renunciar a su cargo. ETC, ETC, ETC. Entiendes Franz? Tus fantasías de coaccion colectiva no tienen sentido. Ante la presión colectiva y su correspondiente severidad, un presidente decide renunciar o quedarse en el poder con las consecuencias que esto conlleva (caos, reformas, etc)
Finalmente, ni el propio Sanchez de Lozada, estaría de acuerdo contigo. En su carta de renuncia manifiesta, “El Congreso de acuerdo a la atribución contenida en el artículo 68 inciso cuarto de la Constitución Política del Estado debe decidir si la acepta o la rechaza, si la acepta el vicepresidente de la República deberá asumir la presidencia y ejercerla hasta la finalización del periodo constitucional por mandato del artículo 93 inciso segundo de la Carta fundamental.”*
Para colmo de colmos, un periódico de circulación nacional decide publicar tu sarta de incongruencias. Una cosa es publicar argumentos disidentes, y otra muy diferente es publicar sofismas con apariencia plausible. Franz te pido un poco de ética!
Lo que sucede es que no puedes entender mi lógica, no te culpes no todos están obligados a razonar bajo premisas jurídico-científicas: Evidencia de ello es que no puedes, como siempre, refutar una sola coma de mi argumento; que es lo que importa. Por lo demás, seguí participando, divertinos ¿ok?
¿GSL era jurista? Jajaja…Sus asesores y su entorno en general no dejaron de ser unos jurídicamente negados como las mayorías bolivianas (incluido tu) lo son. Lo que no impide que, quienes conocemos la ciencia jurídica, cuando nos venga en gana, enseñemos al lego la verdad.
Y con respecto a la cartita de GSL, ¿te has preguntado en qué parte del ordenamiento jurídico -vigente entonces- se contiene la atribución de «renunciar» del Presidente? 😀 Sencillamente NO EXISTE, Tómate el «enorme esfuerzo» de revisar la norma ¿ok?
Te pregunto, en que lugar del ordenamiento jurídico de entonces se establece que el presidente NO puede renunciar? “Sencillamente NO EXISTE” … Te das ahora cuenta de la absurdez de tu comentario.
Reproduzco a continuación parte del articulo 68 de la anterior constitución política del Estado:
Art. 68. Atribuciones del Congreso
Las Cámaras se reunirán en Congreso para los siguientes fines:
1. Inaugurar y clausurar sus sesiones.
2. Verificar el escrutinio de las actas de elecciones de Presidente y Vicepresidente de la República, o designarlos cuando no hubieran reunido la pluralidad absoluta de votos, conforme a las disposiciones de esta Constitución.
3. Recibir el juramento de los dignatarios mencionados en el párrafo anterior.
4. Admitir o negar la renuncia de los mismos.
El inciso cuarto atribuye al congreso admitir o negar la renuncia del Presidente o Vicepresidente de la Republica.
Franz nos habla de la “ciencia jurídica.” Me veo en la obligación de recordarle a nuestro estudiante universitario que esta “ciencia” está basada en interpretaciones de leyes que en muchos casos contienen ambigüedades a raíz de la esencia misma del lenguaje utilizado u omisiones de sus redactores.
Franz, ojala que en tu respuesta no hagas uso de las chicanearías que muchos de los auto-proclamados “doctores” en «ciencias juridicas» están acostumbrados en Bolivia.
C. Mesa, Rodríguez Veltzé y Evo Morales son igual de INCONSTITUCIONALES y ‘de facto’ que García Meza: Y a partir de ahora, QUIEN SEA QUE HAGA GOLPE DE ESTADO PARA ‘RESTITUIR LA VIGENCIA DEL ESTADO DE DERECHO’ ACTUARÁ EN LEGÍTIMA DEFENSA Y CON NECESIDAD JUSTIFICANTE.
R.C.: El que el Congreso republicano se reuniera para «Admitir o negar la renuncia de los mismos», no implica bajo ningún concepto (menos uno jurídico) que se dé «por sobre entendida» la existente de la SITUACIÓN JURÍDICA PRESUPUESTO «renunciar» del Presiente, dispuesta como atribución.
«Art. 96. Atribuciones del Presidente de la República
1. Son atribuciones del Presidente de la República:
2. Ejecutar y hacer cumplir las leyes, expidiendo los decretos y ordenes convenientes, sin definir privativamente derechos, alterar los definidos por la ley ni contrariar sus disposiciones, guardando las restricciones consignadas en esta Constitución.
3. Negociar y concluir tratados con naciones extranjeras; canjearlos, previa ratificación del Congreso.
4. Conducir las relaciones exteriores, nombrar funcionarios diplomáticos y consulares, admitir a los funcionarios extranjeros en general.
5. Concurrir a la formación de Códigos y Leyes mediante mensajes especiales.
6. Convocar al Congreso a sesiones extraordinarias.
7. Administrar las rentas nacionales y decretar su inversión por intermedio del respectivo ministerio, con arreglo a las leyes y con estricta sujeción al presupuesto.
8. Presentar al Legislativo dentro de las 30 primeras sesiones ordinarias, los presupuestos nacional y departamentales para la siguiente gestión financiera y proponer, durante su vigencia, las modificaciones que estimen necesarias. La cuenta de los gastos públicos conforme al presupuesto se presentará anualmente.
9. Presentar al Legislativo los planes de desarrollo que sobrepasen los presupuestos ordinarios en materia o en tiempo de gestión.
10. Velar por las resoluciones municipales, especialmente las relativas a rentas e impuestos, y denunciar ante el Senado las que sean contrarias a la Constitución y a las leyes, siempre que la municipalidad transgresora no cediese a los requerimientos del Ejecutivo.
11. Presentar anualmente al Congreso, en la primera sesión ordinaria, mensaje escrito acerca del curso y estado de los negocios de la administración durante el año, acompañando las memorias ministeriales.
12. Prestar a las Cámaras, mediante los Ministros, los informes que soliciten pudiendo reservar los relativos a negociaciones diplomáticas que a su juicio no deben publicarse.
13. Hacer cumplir las sentencias de los tribunales.
14. Decretar amnistías por delitos políticos, sin perjuicio de las que pueda conceder el Legislativo.
15. Nombrar al Fiscal General, Contralor General de la República y Superintendentes de las entidades de función económica y social en las cuales tiene intervención el Estado, de las ternas propuestas por la Cámara de Diputados.
16. Nombrar a los empleados de la administración cuya designación no esté reservada por ley a otro poder, y expedir sus títulos.
17. Nombrar interinamente, en caso de renuncia o muerte, a los empleados que deban ser elegidos por otro poder cuando éste se encuentre en receso.
18. Asistir a la inauguración y clausura del Congreso.
19. CONSERVAR Y DEFENDER EL ORDEN INTERNO Y LA SEGURIDAD EXTERIOR DE LA REPÚBLICA, CONFORME A LA CONSTITUCIÓN. (para los GOLPISTAS)
20. Designar al Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas y a los Comandantes del Ejército, Fuerza Aérea, Naval y al Director del Comando Superior de Seguridad Pública.
21. Proponer al Senado, en caso de vacancia, ascensos a General de Ejército, de Fuerza Aérea, de División, de Brigada, a Contralmirante, Almirante y Vice-Almirante de las Fuerzas Armadas de la Nación, con informe de sus servicios y promociones.
22. Conferir, durante el estado de guerra internacional, los grados a que se refiere la atribución precedente en el campo de batalla.
23. Crear y habilitar puertos menores.
24. Designar a los representantes del Poder Ejecutivo ante las Cortes Electorales.
25. Ejercer la autoridad máxima del Servicio Nacional de Reforma Agraria. Otorgar títulos ejecutoriales en virtud de la redistribución de las tierras, conforme a las disposiciones de la Ley de Reforma Agraria, así como los de colonización.»
Ahora bien, en qué parte de este catálogo de atribuciones yace -expresamente- establecida, (con carácter de ORDEN PÚBLICO para tu conocimiento), la SITUACIÓN JURÍDICA PRESUPUESTO denominada “RENUNCIA”, simplemente no existe. Lee y re lee NO LA VAS A HALLAR.
Y mi señalamiento sobre a la NULIDAD SUBSECUENTE, va más allá. Pues descubrí (muy a mi pesar) que inclusive la Constitución republicana de 1967 (cnrfms.), con respecto a la situación jurídica presupuesto denominada “renuncia”, sujeto a estudio en los Arts. 68 y 96, es incoherente, según evidenció.
Lo reitero, se debió haber verificado, sumaria y congresalmente, si la figura del IMPEDIMENTO (absoluto y/o permanente) exigido por el orden público constitucional, había sido satisfecha y probada. Dicho requisito (IMPEDIMENTO) establecido en el parágrafo I del Art. 93, el único aplicable por analogía legis como causal de “VACANCIA”, exigía su necesaria comprobación para generar el efecto jurídico legítimo de la asunción de la Presidencia por el Vicepresidente de la República.
¿Ok? Eso más… objeto de tesis te estoy obsequiando “waway”; empero, lástima que no seas un iluminado para saber aprovechar.
Me olvidé, de buena fe créeme, y presumí que un lego como tú conoce que es: 1) situación jurídica presupuesto, renuncia, vacancia, e impedimento. Tendrás que estudiarlas, aunque tardíamente, por tu cuenta ¿Me disculpas? 😀
Franz,
Otro problema insubsanable de tu argumento es que tipificas la renuncia presidencial como si esta sería una atribución del presidente. Evidentemente las leyes contienen palabras que pueden ser sujetas a diferentes interpretaciones, pero pretender interpretar la renuncia como una atribución o poder presidencial denota, o, una torpeza de tamaño descomunal o la carencia absoluta de ética a la hora de construir un argumento.
La palabra “atribuciones” en el Art. 96 de la anterior constitución se refiere inequívocamente a la protestad, poderes, o funciones que puede y debe desempeñar el Presidente de la República. Por ejemplo, el mencionado artículo establece que es atribución (función, protestad, etc) del presidente, entre otras cosas, nombrar al Fiscal General y Contralor General de la República de las ternas propuestas por la Camara de Diputados. Además de designar al Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas y a los Comandantes de las diferentes fuerzas que la componen. Es también protestad (atribución) del presidente designar a los representantes del Poder Ejecutivo ante las Cortes Electorales. Etc, etc, etc. La figura de renuncia no puede ser tipificada como una “atribución” del presidente. La renuncia es un derecho individual que trasciende a la investidura presidencial. La figura de “mandato irrenunciable” no existe en la anterior constitución. Además el Art. 68 estable que es protestad (atribución) del Congreso admitir o negar la renuncia del presidente o vicepresidente.
No era mi intención direccionar el debate al terreno jurídico, que a pesar de ser importante, no debería pasar a ser un pie de página en el análisis de este hecho tan trascendental en la historia boliviana. La renuncia de Sanchez de Lozada el 2003, tiene connotaciones políticas, históricas y económicas que van más allá de un pseudo-analisis jurídico. Me parece que Sanchez de Lozado hizo lo CORRECTO al renunciar a la presidencia en Octubre de 2003. Su renuncia evito un mayor derramamiento de sangre. Además de que su presidencia había llegado a un nivel de desgastamiento tal que le hubiera sido prácticamente imposible seguir al mando del país. Aunque el ordenamiento jurídico vigente en esa época, hubiera establecido el mandato irrenunciable, la obligación moral de cualquier presidente ante fracaso de tal magnitud, hubiera sido dar un paso al costado.
Si tienes la tozudez de mantener tu posición, te aconsejo que busques la opinión de un experto. ¿Por que no buscas a uno de tus catedráticos en la universidad y le pides amablemente que te explique la definición de “atribución”? Respecto a tus alusiones personales, simplemente te digo que algún día en el futuro caerás en cuenta que ese tipo de actitudes son infantiles e inmaduras. Tiempo al tiempo Franz.
No quisiera intervenir en ésta discusión , pero me parece que la formación jurídica de Franz Barrios, es como la de un niño de quinto básico en mi país; nada universitario, por cierto.
Chile tiene muy en alto el concepto de lo jurídico, lo legal e institucional, y por sobre todo, un RESPETO ENORME A LAS INSTITUCIONES JURÍDICAS NACIONALES E INTERNACIONALES, que saben interpretar las leyes; pero algo como este desquiciamiento jurídico de «Franz Barrios….nunca jamás ha sido visto históricamente en Chile; ningún particular jamás se ha creído docto e interprete legal del país, y menos aún que menoscabe y denigre a algún compatriota.
Alguna vez le dije a éste aprendiz de leyes,…… en realidad lo tipifiqué como «tinterillo» ,… que ataca a las persona y no sus ideas; eso habla muy mal de su supuesta «intelectualidad»…..si es que la tiene; y no me arrepiento, para nada.
Este pseudo personaje jurídico debiera ser denunciado y castigado.
A Franz Barrios, nadie lo visita ni le comenta en su blog, entonces, ahora se aprovecha de la popularidad del blog del Sr. Mesa para hacerse notar y promocionar su blog; es una manera de buscar «presencia y nombre «.
Sin querer faltarle el respeto a nadie, tendría que deducir que en el país de los ciegos, el tuerto el rey,no?
Saludos al Sr. Mesa
Por suerte no dejaste de ser el mismo, es decir el mismo lego, de cuando fuiste superado jurídicamente con mis argumentos sobre el tema del mar. Un doloroso recuerdo el tuyo no? 😀
Al menos harías el esfuerzo de «justificar», jurídicamente claro está, (si acaso eso te fuera posible en esta vida) el por qué, según tú, mi formación jurídica «es mala». Pero vemos que no, como ayer, ahora y siempre, simplemente no puedes. Debe ser triste que la impotencia te consuma.
Finalmente, quienes podemos denunciar la verdad histórica, lo haremos siempre y en cualquier espacio.
Sr. Mesa, creo que debo disculparme profundamente; es verdad, porque no está en mí el ofender gratuitamente a otros, a nadie, menos aún a todo un pueblo, como el boliviano, sin duda hermano nuestro, aunque tengamos diferencias muy profundas.
Les ruego a todos quienes participan del blog del Sr.Mesa, a mis hermanos bolivianos, disculpar mis estúpidos improperios y ofensas contra ese maravilloso pueblo ; en realidad nunca quise ofenderlos y, tarde me dí cuenta de mi error.
Espero vuestra consideración a mi error.
Que Dios Bendiga a todos quiénes perdonamos.
Aprecio su actitud y subrayo las disculpas que usted ofrece. Como he comentado varias veces, no le hace ningún bien al debate el uso de adjetivos, o la descalificaciones. Confío en que en el futuro su participación, que destaco, se haga sobre la base de las ideas centrales que usted defiende y en las que cree
Gracias Sr. Mesa, muchas gracias, me comprometo a no volver a incurrir en éste lamentable error.
«García Linera afirma que Evo ganó las elecciones de 2002 y no Goni.»: Entonces, si GSL «no ganó» y ejerció bajo la calidad de Presidente, VICIÓ su corta gestión, VICIANDO consecuentemente la (inconstitucional) sucesión de Carlos Mesa, Rodríguez Veltzé, y la convocatoria a las elecciones adelantadas que dieron por ganador a Evo Morales.
Es decir que, bajo el razonamiento de García Linera, Evo Morales deviene de todo un proceso VICIADO; y por tanto su ejercicio estos últimos años es insubsanablemente NULO.
Bravo!!!
Para empezar (RC), sabe muy bien que jamás “direccionaste el debate al terreno jurídico”. 1) Porque eres un jurídicamente negado, y 2) porque jamás hubo “debate”, menos contigo, no tienes ese privilegio. Ni siquiera es una relación de atril-público (tu), no. Simplemente, es como si hubieras escuchado una charla ajena en un café, y quisiste inmiscuirte ¿ok? No obstante para desasnarte, las atribuciones presidenciales contenidas en la CPE de 1967 cnrfms. y en la actual, por una cuestión de sistemática y doctrina (que naturalmente ignoras), son derechos. Dentro los cuales debió/debería yacer expresamente la atribución o derecho de “renunciar”, en consonancia con el artículo que define al mandato presidencial o periodo constitucional, y la atribución de la Asamblea (otrora Congreso) para la consideración de una eventual “renuncia”, entre otros.
Ahora bien, para quienes se resignan y desmoronan ante la lógica, la razón y la evidencia jurídica de mis premisas sobre la figura del IMPEDIMENTO (absoluto y/o permanente) exigida por el orden público constitucional; establecida en el parágrafo I del Art. 93, el único aplicable por analogía legis como causal de “VACANCIA” (que la ignorancia sobre la sistemática constitucional les impide entender), para generar el efecto jurídico legítimo de la asunción de la Presidencia por el Vicepresidente de la República, lo reitero; concluiré este placentero aleccionamiento -ahora- desde la perspectiva de la situación jurídica de Vicepresidente y sin necesidad de abandonar el precitado Art. 93. A saber:
La Constitución de 1967 crfms. en su Art. 93° parf.II disponía -expresamente- “El Vicepresidente asumirá la Presidencia de la República si ésta quedare vacante antes o después de la proclamación del Presidente electo, Y LA EJERCERÁ HASTA LA FINALIZACIÓN DEL PERIODO CONSTITUCIONAL.”
Como sabrán, Carlos Mesa ejerciendo bajo la calidad de Presidente, “renunció” 2 veces (la 2da con “éxito”), VIOLANDO EL ORDEN PÚBLICO CONSTITUCIONAL (Art. 93° parf. II) que le imponía ejercer la Presidencia de la República HASTA LA FINALIZACIÓN DEL PERIODO CONSTITUCIONAL. Y para su conocimiento, en virtud al Art. 87° de la Constitución entonces vigente, el periodo constitucional o mandato improrrogable del Presidente de la República era de CINCO años.
Es decir, suponiendo que el Congreso de la República hubiera puesto a consideración del pleno el hecho de si el requisito de orden público constitucional denominado “impedimento” había sido satisfecho o no con respecto a GSL (situación que no ocurrió según comprobé jurídicamente), Carlos Mesa, una vez abierta la sucesión presidencial, NO DEBIÓ “RENUNCIAR” (ni una sola vez). Ya que estaba constreñido a FINALIZAR EL PERIODO CONSTITUCIONAL iniciado en agosto de 2002. Se entiende salvo enfermedad o muerte, es decir IMPEDIMENTO; que no fue el caso.
En adición, si tolerásemos la ligereza con la que fue redactado el Art. 68 núm.4 (“Admitir o negar la renuncia…”), inclusive así, esta consideración congresal estuvo condicionada a que el Presidente estuviera impedido de ejercer el cargo (como consecuencia de un golpe de Estado que lo obligó a ausentarse), para en virtud de tal comprobación recién activar la sucesión presidencial de su Vicepresidente Mesa, como el ordenamiento jurídico exigía. No cabe otra interpretación, jurídica al menos.
Empero, volviendo a las renuncias de Carlos Mesa, con estas se comprueba que Mesa (como Evo Morales lo hiciera para habilitarse ilegalmente a un tercer mandato) fue el primero en INTERRUMPIR el periodo constitucional o mandato improrrogable, VIOLANDO EL ORDENAMIENTO JURÍDICO VIGENTE.
• Mesa ocupó la situación jurídica de Vicepresidente de Sánchez de Lozada entre el 6 de agosto de 2002 y el 17 de octubre* de 2003. Siendo CO-RESPOSANBLE de toda acción y omisión de su Gobierno, incluidas las muertes.
• Mesa ocupó la situación jurídica de Presidente entre el 17 de octubre de 2003 y el 9 de junio de 2005.
Calculen cuánto faltaba para que finalizara dicho periodo constitucional, de acuerdo al orden público constitucional y sin la causal de IMPEDIMENTO, ¿ok?
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*Eso sin tener que recordarle al dilecto público que se renueva cada día, que según mi teoría (una de las tantas con las cuales evidencio la INCONSTITUCIONALIDAD de la sucesión presidencial de Mesa y R. Veltzé, y la NULIDAD subsecuente que incluye la asunción de Evo Morales, respectivamente), desde el lunes 13 hasta el viernes 17 de Octubre de 2003, Mesa incurrió EN ABANDONÓ DE FUNCIONES. Es decir DEJÓ DE SER VICEPRESIDENTE. Hecho que fue confesado cuando anunció “que le era imposible pensar en su retorno al Gobierno” durante una conferencia de prensa el 16 de Octubre desde su domicilio particular.
QUIERO DESIRLES A LOS JOVENES DE BOLIVIA QUE SI ESTE DIGNO HOMBRE NO HACE ESTA HEROICA TRANSICION EN EL PAIS, CON SEGURIDAD ESTAMOS FRENTE A UNA GUERRA CIVIL; Y LO QUE TENEMOS QUE PONER DE RELIEVE Y RECORDARLES ALGO QUE NO SE MENCIONA NUNCA, QUE SOLO NOS FALTABA VER GOBERNAR A LOS HIJOS DE SUS HIJOS DE LOS ANTERIORES PRESIDENTES, TODO UN ASQUEROSO CLAN DE GOBERNANTES, PERO SE ROMPIO EL CIRCULO, AHORA ESPEREMOS QUE LES ALCANSE TODO EL DINERO QUEROBARON Y QUE SIGAN VIVIENDO EN NUEVA YORK O MIAMI. SENOR CARLOS D. MESA, UN BUEN CIUDADANO DEL MUNDO QUIERE DESIRLE QUE SU DIGNIDAD Y AMOR A SU PATRIA QUEDA DEMOSTRADA CON TAN SOLO VIVIR EN ELLA
QUISE DESIR ESTO PUBLICAMENTE, ES IMPORTANTE HACERLO FRENTE A LOS CANALLAS QUE SE CREEN SER DIGNOS PERO HUYEN PORQUE SABEN LO QUE LES ESPERA; LA JUSTICIA DIVINA SE ENCARGARA.
Hermoso y fundamentado discurso, que en gran parte ha sido ejecutado por el actual presidente Evo Morales. !Saludos!